La trama sigue a Fang Siqi, una niña de 13 años que es manipulada y abusada sexualmente por Li Guohua, el profesor de mandarín de su instituto. La autora emplea la historia de Siqi como un reflejo de sus propias experiencias de abuso a manos de un profesor en su infancia, despliega una narrativa que es tanto una exposición de un trauma personal como una ataque audaz contra una sociedad que sistemáticamente encubre y perpetúa la violencia sexual y dejando a las víctimas en un estado de desesperanza y aislamiento.
El relato profundiza en cómo el tabú y el silencio sobre la sexualidad femenina se utilizan como herramientas para justificar y ocultar el abuso sexual y la violación, donde la víctima es a menudo culpabilizada. “Es culpa tuya, eres demasiado guapa” , en la novela, las palabras que Li utiliza para justificarse representan el pretexto más común empleado por los agresores. Frecuentemente, los violadores escudan sus acciones culpando a las mujeres, argumentando que es la indiscreción de ellas lo que incita a los hombres a delinquir. Lin escribió el monólogo de Li en su obra: “Descubre que el tabú social sobre el sexo funciona tan bien con él. Cada vez que viola a una chica, todo el mundo piensa que es culpa de ella; incluso la propia chica cree que debe ser culpa suya”.
El libro va más allá de ser una simple narración del sufrimiento de Siqi. Es una crítica mordaz a las estructuras de poder que mantienen la dominación masculina y perpetúan el ciclo de violencia y silencio.
Lin Yihan utiliza su narrativa para forjar un llamado al cambio, enfatizando la necesidad de centrar la atención en las víctimas y en la brutalidad del daño causado. La novela no solo actúa como un desahogo para el dolor de Yihan sino como un medio de rebelión y recuperación de poder, haciendo de la escritura un refugio y un arma.
La obra Fang Si-Chi’s First Love Paradise es un grito de batalla para las supervivientes de violación, un llamado a rechazar la autoculpabilización y a enfrentar a los agresores, Lin Yihan impulsa a las mujeres a enfrentarse a los agresores, esta obra ha transformado un llamado individual en un movimiento colectivo, muchas mujeres han comenzado a revelar experiencias de agresión sexual y acoso sexual en Internet, con unas pocas valientes dando el primer paso e inspirando a más y más mujeres a responder, creando un efecto dominó, aquí es donde surge la relevancia de la escritura femenina.